HUNGRY EYES... ( 20 DE FEBRERO)

Recuerdo aquella película...

Tras haberla visto algunas decenas de veces, se me hace imposible olvidarla...

Supongo que a esa edad, todas queríamos ser el patito feo que acababa encontrando el amor de manera tan sensual e incluso erótica...

Se mostraban los cuerpos de aquella manera, y siempre pensé que yo quería ser como la protagonista, siempre y cuando no me cruzara en mi camino con un hombre sordo de pies y arrítmico total...Yo quería al Swayze...

Todas debíamos pensar que queríamos a la larga vivir una historia así...

Pero para mi desgracia no tuve hermanas, ni un padre que nos llevara de vacaciones a un paradisíaco enclave lleno de bailarines que por la noche dejaban aflorar la furia que sus cuerpos llevaban dentro...

Adentrándose en la música...

Viviendo de ella...

Haciéndolas suyas...



Soñé en ir a parar a un lugar así, y lo más lejos que llegué fue a irme de vacaciones a la playa los domingos de los meses de agosto siempre que no trabajara papi...



Esta noche tiene en común algo con la del sábado, y es que esa misma música sonaba hoy en la radio, igual que la otra noche, cuando volviendo de urgencias y para silenciar el ruido del coche sobre el asfalto, a una le da por poner Kiss FM...



Sí, que tengo un hijo que cree que a las 3108 visitas en el hospital, van a regalarnos un viaje a Disney World, y lo pilla todo...

Todo lo que haya por pillar...



Llevo algunos días pensando en el tiempo que hace que no pillo una gripe o un catarro...

Lo cierto es que no recuerdo cuando fue la última...

Para octubre si mal no voy...

Desde entonces he tenido poco tiempo, y sin tiempo para poder quejarte, creo que el organismo crea barreras y las bacterias y “ víruses” varios, pasan de largo...

No puedo quedarme en cama, así que iba a darles muy mala vida...

En el fondo “ esos bichitos” son muy listos o yo demasiado tonta...

Sea como sea, la falta de tiempo me lleva a no enfermar...



Doce y media de la noche y peque empieza a quejarse...

No sabe decirnos qué le pasa ni qué le duele...

Chute de Dalsy y tres cuartitos de hora aguantando a ver si mejora...

Parece que lo hace y en cuanto logro volver a conciliar el sueño empiezan de nuevo las quejas...

Salimos a las dos hacia el hospital...

Sigo igual de embotada que el sábado, y siento que para planificar el trayecto tengo serios problemas... Me siento como un gps defectuoso...



Carreteras vacías, lo que hace que te olvides de las restricciones de velocidad a la entrada a Barcelona...

Espero que no llegue la multa, porque ando segura de haber respetado los límites de vuelta, pero de ida...



Llegamos al peaje y saludo al chico que se encuentra en la cabina...

Peque eufórico saluda también...



_Si no fuese atado a la sillita diría que venís de botellón...



Sonrío y recojo el cambio...



Llegamos a casa y tras darle otro bibe, lo acuesto esperanzada.....

Necesito dormir por favor...



Ya lo harás mañana...

Peque sigue con ganas de juerga, así que voy a meterlo en mi cama y vamos a jugar a encontrarnos la boca, la nariz, las orejas y los ojitos...

Esos que por estar hambrientos, lo están más de sueño que de cuerpos que se contonean al ritmo de la música...