DE NUEVO TÚ...

Si hubieras dejado un billete sobre la mesita no me hubiera sentido tan insultada…
Varios días pensando si merecía la pena contestar a tus palabras…
Qué decir en ellas.
Intentando ahogar el asombro y lo que parece burla.
Y finalmente decidí contestarlas cuando el temple, la calma y el sosiego, me hicieron seguir entendiendo.
Porque entiendo que de no hacerlo así, de la única manera en que me siento capaz, sería como tú.
Aunque tal vez lo esperes para que acabe de una maldita vez con esta historia que sólo a ti parece interesarte.
Que sólo tú pareces interesado en mantener agonizante…

…Estuve.
Siempre.
Eso cambió cuando entendí que para mí, apenas unos cuantos.
Y tú querías estar fuera.

Animé y envalentoné tus deseos.
Enterrando así los míos.
Y ni te imaginas de qué manera dolió.
Busca entre las palabras.
Lo mismo te asombra saber cuántas noches fuiste motivo de ellas.
Busca en la añoranza de éstas.
Y lo mismo te asombra darte cuenta de cuántas noches fuiste portador de ellas.
Busca en la soledad de las mismas.
Lo mismo entiendes cuantas noches deseé que fueras ellas.
Y vestirte de besos con la misma boca que jamás las pronunciará…

…Intenté seguir viviendo.
Buscando atajos para sinónimos que me mantuvieron a la espera.
Como hiciste tú.
Calmando la sed y el dolor que causaban sobre mí las palabras que querías escuchar y te libraban de culpa…
Las palabra son las mismas.
También el deseo de verte sonreír.
Aunque para ello dominé todo el egoísmo que no porto a día de hoy porque jamás quise perderme.
No quise aprender del rencor.
Y dejé morir recuerdos, olores, tus ojos y mis noches...

Vuelves tras haberlos escondido tantas veces, que me pregunto si se debe a que sigues recordándolos como yo aunque no quieras admitirlo, o sólo para que pueda seguir desconociéndome, porque haga lo que haga, ya no lo haré para beneficiarte a ti, si no a mi…

No era el momento.
No debía haberlo sido nunca.
No debía haber habido tiempo, y lo hubo...
No hubieron engaños.
Acepté el juego.
Debías saber que estaba dispuesta a seguirlo.
He seguido jugando hasta el día de hoy.
Y ahora abandonas.
Sin darte cuenta de que dejaste de jugar hace mucho.

No busco coartadas.
No las hay.
No para mí.
Para ti las hubieron siempre.
Eso te convierte en cobarde y perdedor.
Abandonaste la partida y con ello, perdiste el juego...

…Sólo porque no sigo tus reglas cuando a ti te parece…

Esto es, sólo la historia que se acaba cuando levanta la mañana…
Sólo necesitaba planear hasta adivinar tu movimiento.
Y moviste mal las fichas.
Has necesitado gritarlo al mundo para poder así creerlo.
Sólo para hacer que yo te crea.
Permite entonces que haga lo mismo, sólo para disfrutar de la fracción de segundo de que me serviré para admirarte vencido.

Siento paz.
El día que tú la encuentres, volverás a recordar con una sonrisa en los labios.
Lejanos.
Y encuentres en ellos, el motivo.
La encuentres a ella.
De nuevo.
Todas estas eternidades después…

Cada vez duelen menos.
Déjalos morir.
Ya te dieron un ratito de vida.
Que cada vez te hagan morir menos.
Esta vida pasa rápida, y es demasiado el tiempo que perdemos en decidir si saltamos o no…
Acabaste tu tiempo…

Son éstas tus palabras?...
…No las enmarques en ningún cielo que no sea el de tu boca…
Trágalas poco a poco.
Y no les permitas que se aferren a tus entrañas…



;-Ciao