MENTIRAS AL DESNUDO O...DE CÓMO ESCRIBIR HACE QUE TE PERCATES DE UN TIEMPO Y SU PASO...
Anoche me planteaba, antes de caer rendida mientras alguna que otra despistada recorría un ojo hasta rozar el otro, cómo era posible que lo más lejano, haya ido agrandando su sombra, mientras el alma, las niñas de los ojos, y aquella que nunca fui, anden extinguiéndose…
…Cómo ha llegado a sellar mi boca hasta volverla yerma.
Si hoy iba a plantearme seguir contándote mentiras…
Esas mentiras que sólo unos pocos conocen...
Y aunque entiendo que mentirte no va a devolverme nada de lo perdido, infantilmente…
Y si te dijera que es el mes de Abril.
Así. Sin más.
Entenderías lo que llevo tratando de ocultar todas éstas palabras después?...
Reconozco que no te falta razón cuando hablas del aliento que aportan.
Pero qué hago con las que soy incapaz de pronunciar?...
…Aquella calurosa tarde de verano. Bajo la sombra de las parras que se entrelazaban entre sí, hasta cubrir por completo el cielo de verde…
Los arriates que se alzaban un palmo sobre el suelo de cemento…
La bodega que en la parte baja de ese mismo patio trasero servía para que la fruta no se echase a perder antes de tiempo…
Aquel suelo frio.
El recuerdo que hoy se tiñe de vaho…
El miedo.
La angustia que sigue carcomiéndome las entrañas…
Aquel olor a orín.
La puerta que sigue abierta veintiocho años después.
Marchitando las parras y haciendo que las manzanas se picaran mucho antes de la hora prevista.
No soportar cielos verdes…
Viviendo entre las mentiras que tuve que inventar para no aceptar que ya entonces estaba muerta.
Ya entonces…
Qué más dará lo que tenga que decirte, si soy incapaz de vivir sin mentirte…
A veces pienso...Y luego…Luego nada... Palabras y sólo palabras.
Ciao.
;-P
…Cómo ha llegado a sellar mi boca hasta volverla yerma.
Si hoy iba a plantearme seguir contándote mentiras…
Esas mentiras que sólo unos pocos conocen...
Y aunque entiendo que mentirte no va a devolverme nada de lo perdido, infantilmente…
Y si te dijera que es el mes de Abril.
Así. Sin más.
Entenderías lo que llevo tratando de ocultar todas éstas palabras después?...
Reconozco que no te falta razón cuando hablas del aliento que aportan.
Pero qué hago con las que soy incapaz de pronunciar?...
…Aquella calurosa tarde de verano. Bajo la sombra de las parras que se entrelazaban entre sí, hasta cubrir por completo el cielo de verde…
Los arriates que se alzaban un palmo sobre el suelo de cemento…
La bodega que en la parte baja de ese mismo patio trasero servía para que la fruta no se echase a perder antes de tiempo…
Aquel suelo frio.
El recuerdo que hoy se tiñe de vaho…
El miedo.
La angustia que sigue carcomiéndome las entrañas…
Aquel olor a orín.
La puerta que sigue abierta veintiocho años después.
Marchitando las parras y haciendo que las manzanas se picaran mucho antes de la hora prevista.
No soportar cielos verdes…
Viviendo entre las mentiras que tuve que inventar para no aceptar que ya entonces estaba muerta.
Ya entonces…
Qué más dará lo que tenga que decirte, si soy incapaz de vivir sin mentirte…
A veces pienso...Y luego…Luego nada... Palabras y sólo palabras.
Ciao.
;-P
Buena reflexión, me gusta, porque a pesar de todo no pareces recorosa y tus letras evocan recuerdos bonitos sin amarguras grandes.
ResponderEliminarEspero que hayas podido solucionar tus problemas tecnológicos, yo algo ya empecé a notar en este tu blog, hace unos días... Te deje un par de comentarios a un par de entradas tuyas y ná de ná, que no los veo publicados.
Bueno, nenita, te me cuidas, te resguardas de la lluvia y del frío de "la botiga del món".
Besets i nanit,
Amber
Me ha gustado tu reflexión y tu manera de transmitir. Vengo para darte las gracias por tu visita y me quedo disfrutando de tus letras. Me ha gustado mucho tu descripción del perfil.
ResponderEliminarBesos Heidi.
Amber bonita. Lo sé. Mi pen de movistar se muere a ratos ( últimamente demasiados .
ResponderEliminarUn besazo! Sigo leyendo. Me pongo al día en ná y menos.
Rosalía Bienvenida.
ResponderEliminarSiéntete en casa.
Un abrazo!
Gracias.
;-P