DÉJAME DECIRTE...( VIII )



Viernes 19 de junio. Último día de cole para peque. Su padre y yo nos encaminamos de nuevo a la visita con la Inspectora de zona.

El mismo ritual de la otra vez al llegar al edificio y aclararle a la chica de recepción que tenemos visita. Dejamos nuestros d.n.i y tras que los haya escaneado, nos da paso.

Dos plantas. Algo laberínticas si no has estado nunca.

Una vez en la segunda planta, hay otro recepcionista al que no vimos la primera vez. Nos hace esperar y rato después es la propia Inspectora la que viene a recogernos para llevarnos a otro despacho anexo al que estuvimos el primer día.

Tras volver a repasar el expediente de mi hijo, le explico lo que nos lleva a estar de nuevo allí.

He tenido algunos cambios de parecer con su profesor que he ido plasmando en la agenda de mi hijo. Ella se centra en hablar de lo que ha ocurrido tras la reunión que mantuviéramos el día 8 de mayo. Los cambios han sido pocos y no se han puesto en marcha las estrategias que demandamos y que desde el centro nos prometieron que trabajarían. Me enfado cuando ella los repasa porque ya ha estado en el centro y los ha recogido en una lista. Me echa en cara que yo no haya puesto en marcha lo que prometimos hacer desde casa. Habla del “ Diario de los Buenos Momentos”.

_Eso es mentira. Mi hijo lleva ese diario desde el lunes día 25 de mayo en su mochila. Lo ha llevado todos los malditos días al colegio y solo hay escrita una nota, la que peque hiciera para avisar a sus compañeros de que habíamos adoptado a Ónix.

_Desde el centro el profesor me dice que eso no es verdad.

Me sulfuro muy mucho. Me cabrea.

Trata de decirnos que no estamos de acuerdo con nada de lo que se ha hecho desde el centro. Le digo que se equivoca, pero tan importante es la aceptación de mi hijo dentro el aula ( trabajo que ha hecho en la medida de lo posible su tutor), como enseñarlo a trabajar. Tengo que repetirle esto en un par de ocasiones porque no tarda en volver a la carga con la misma historia.

Un mes. Ese es el plazo de tiempo que nos pide de cara al nuevo curso para ver si realmente se está trabajando todo lo que se debe. Ese tiempo le damos. No vamos a esperar un solo día más. El siguiente paso es denunciar y sacar a mi hijo de este sistema educativo. Puestos a trabajar como venimos haciendo a lo largo de todos estos años, seguiremos haciéndolo desde casa.

Llevo copia del informe que nos hicieron en el Ceib donde se especifica clara y ampliamente que mi hijo no está preparado para llevar a cabo una vida normal y que es incapaz de sentirse a gusto en espacios diferentes si no se adaptan a sus necesidades en la medida de lo posible para él.

Ese mismo viernes recojo a peque de casa de los abuelos. Espero con ansia llegar a casa y ver sus trabajos. Compruebo que todavía hay hojas sueltas de diferentes materias en su carpeta, y que deberían estar archivadas en el trabajo de final de trimestre. Trae con él sus libros de lectura y los diccionarios de Lengua Catalana y Lengua Castellana. Ha olvidado el de inglés.

No me importan tanto las notas de cada una de las asignaturas, como los comentarios finales en los que se especifica que peque debe mejorar su caligrafía, la presentación de los trabajos y su organización y archivación. Tócate los huevos, porque es imposible que por combustión espontánea mi hijo aprenda si nadie lo enseña o tiene en cuenta sus problemas de motricidad. Algo de lo que llevo quejándome y para lo que llevo pidiendo estrategias a lo largo del curso.

La Inspectora me recomienda que cuando vuelva a verla, lleve el Diario de los Buenos Momentos conmigo. Fotocopia el informe del Ceib y las notas que el tutor de mi hijo y yo hemos intercambiado…

Nos comenta que no seamos tan negativos, que las estrategias que no hemos visto a lo largo de este último mes de curso, vendrán con todo el material del final de trimestre. Nada, ni orla con cara y nombre de sus compañeros, ni plantilla donde se especifique cómo entregar sus trabajos. Ni nota en el Diario…

Sumamos y seguimos. El vaso está casi al límite.

Ya he buscado estrategias varias y materias para trabajarlas durante el verano mediante el juego. Llevo algunos días leyendo de qué manera lo hacen otros padres. Intentando quedarme con aquello que creo que a peque le va a valer. Todo esto a vistas de otra mudanza…

 

Cuídense.

 

Sean Felices.

 

Ciao.

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