DÉJAME DECIRTE ( III )...

 

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24 de abril. 9 de la mañana, y siguiendo las pautas que nos diera la terapeuta del centro privado, dadas también mis prisas y este runrún que llevo dentro, llamo a la Inspectora de zona que debe llevar el caso de mi hijo, para pedirle entrevista. No ha llegado aun.

9:15. Sigue sin llegar.

9:30. Aun no ha aparecido.

_Llame un poco más tarde.

_Disculpe pero no. He llamado ya en tres ocasiones y yo también trabajo. Apunte por favor mi número de teléfono, y que me llame ella en cuanto llegue o tenga un hueco. No puedo perder más tiempo al teléfono.

_Está bien. Deme su número de teléfono.

10 de la mañana y sigo atenta al teléfono. Compruebo a cada poco que no haya bajado el volumen al meter algún trapo o algún pincel en el bolsillo de la bata.

10:30 de la mañana. Nada.

11 de la mañana y me decido a volver a llamar. Me pasan con la Inspectora. Le explico todo lo que hay y lo que no. Que no tenemos dictamen, sí diagnóstico, sí grado de discapacidad…

Tiene a bien concederme una entrevista en dos semanas puesto que el viernes día 1 es festivo.

Vuelvo a reunir todos los papeles que necesito y que no he dejado de pasear estos últimos años. Hago acopio de trabajos y calificaciones escolares.

 

Jueves 7 de mayo. Mientras trabajo observo que tengo una llamada perdida del colegio de mi hijo. No la he escuchado.

Llamo al centro y tras presentarme pregunto si mi hijo se encuentra bien.

_Perfecto. Soy la directora del centro, y llamaba para concertar una entrevista con ustedes a la que también asistirá la psicóloga del E.A.P

_Yaerahora!!!!!!! ( plas, plas, plas, aplausitos mentales) Es por el toque de atención de la Inspectora?

_Eeee…sí. Es porque nos han dado el toque y necesito saber qué pasa.

_Perfecto!

_El día 12 a las 15:30 les va bien?

_Nos va perfecto. Gracias.

_Hasta el martes, entonces.

_Hasta el martes. Ciao.

 

Viernes 8 de mayo. La reunión con la Inspectora. Estoy cabreada. La Inspectora lo nota.

Discutimos acerca del proceso que no ha tenido lugar en la vida de mi hijo. De las vueltas que hemos dado. Las mudanzas. Los cambios de centro escolar. Los especialistas. Los centros, sus profesores, los psicólogos de la Seguridad Social, las psicólogas de las diferentes E.A.P, del desánimo y el cabreo, porque o esto cambia, o mi hijo deja de seguir en este sistema educativo que lo ha ignorado todos estos años. Me pide que me calme. Una mirada me basta para avisarla de que no tengo pensamiento o intención de hacerlo. Lo entiende. La estoy incomodando, lo entiendo, pero ahora mismo quiero respuestas y no largas. Decide empezar a dármelas cuando entiende que puedo explotarle en la cara en el momento menos pensado.

9 años no se arreglan en una charla. Lo entiende. Me permite seguir cabreada, lo agradezco y empiezo a respetarla solo por eso. Debo darle pavor porque apenas me mira a la cara y cuando lo hace, es para retirarla probablemente para que no pueda observar la vergüenza o la falta de funcionamiento o fe en este sistema que ella defiende.

Le hablo de la desesperación, sí desesperación. De la falta de un plan para que lo que le ha ocurrido a mi hijo, no ocurra de nuevo. De la falta de vocación profesional en muchos de los centros y de muchos de los profesionales. De la falta de comunicación familia-centro. De la falta de querer trabajar a la par. De la falta de sentir que alguien nos escucha, de dejarnos decir, de aportar, de sentirnos útiles….de que si eso falla, ninguna madre puede sentirse entendida o respaldada. De lo importante que es no sentirse sola en medio de todo esto. De lo que afecta, de cómo. De lo fácil que es evitarlo…me escucha apuntando en un papel. No espero a que acabe una frase. Disparo una tras otra. Debe estar especializada en apuntar lo que es importante. Debe entender también que he tomado carrerilla y no debe querer mirarme a los ojos…

Me hace llegar que va a trabajar en nuestro caso, y que volverá a ponerse en contacto con nosotros. Quiere averiguar si la falta de dictamen en debido a un problema ( fallo ) burocrático o al “ pasotismo” de la psicóloga del E.A.P

El padre de mi hijo me acompaña. Parece haber despertado. Ha tardado más menos lo mismo que el sistema, y decide apoyarme y ayudarme en esto.

Martes día 12 de mayo. Tenemos reunión en el centro escolar tras haber mantenido ya una con la C.a.p d´estudis, porque la Directora estaba de baja. El padre de mi hijo me acompaña de nuevo.

La psicóloga del E.A.P finalmente no acude porque le han puesto una reunión de última hora en otro centro. La Directora nos pasa el Dictamen de Escolarización. No está completo y hay datos equivocados. No lo firmamos.

_No se preocupen porque la psicóloga viene al centro todos los miércoles y le pediré que cambie lo que está mal y volveremos a quedar para firmarlo.

( Esta señora viene todos los miércoles al centro y ha esperado a que yo me mueva y llame a Inspección para decidirse a acercarnos el puñetero Dictamen? Solo lo pienso yo o está dejando claro dónde debo colocar el listón de su profesionalidad? Y esta señora es la psicóloga de todos los centros de la zona? Pues vamos apañaos, oiga!)

Cerca de hora y cuarto después la reunión acaba. Tengo la impresión de ser un disco rallado. Llevo repitiendo lo mismo, cuánto…? Volvemos a exponer quejas, dudas, hablamos sobre los palos en las ruedas, las demandas a psicólogos, profes y centros que no se cubren. Pregunto por qué tras la reunión con la C.a.p d´Estudis, si ella como Directora fue informada de lo que hablamos, no hemos tenido esta reunión antes. Pide diculpas por ello y por muchas otras cosas.

Hablamos del nuevo centro al que peque empezará a ir al día siguiente. Propiocepción y vestibular parecen sonarle a …nada? Le damos la tarjeta del centro.

Demandamos que haya comunicación entre ese centro y el colegio.

Miércoles 13 de mayo. 7:45 de la mañana. Llevo a mi hijo al Servicio de Bon Día, y dejo en la conserjería del colegio dos dossiers con todo lo que van a trabajar en el centro privado. Especifico que uno es para el tutor, y el otro para el equipo directivo, (entre paréntesis añado que se lo pasen a quienes crean necesario con tal de facilitar y entender el trato con peque) El dossier explica qué trabajan. Cómo funcionan y posibles cambios que puede experimentar el comportamiento y la conducta de mi hijo, derivadas del trabajo en el nuevo centro. La tarde anterior entrego el mismo dossier al profesor de piscina. El lunes se lo entregaré a la profesora de música.

18:05 y nos montamos en el tren camino a Barcelona. Con lo que me gustan los trenes y lo bien que me llevo con ellos!!!

Doy Gracias de ir acompañada para que pueda aprender dónde bajar, si debo o no hacer trasbordos, qué línea tomar y el tiempo que tardamos en llegar. Vuelvo a sentirme una Lina Morgan. Más de pueblo no puedo ser…mi ex-marido da fe de ello.

Luego, a la vuelta, estaremos solos peque y yo. No quiero ni pensarlo. Me colapso y entro en un bucle guapo, cuando yendo hacia Barcelona el tren no para donde debería, y tenemos que correr para llegar a tiempo a la visita con las terapeutas.

Tras dejar a peque, me informan vía Whatsapp de cómo volver…ufff. Sola? Mientras, espero a que peque acabe su primera sesión ( hora y media) en una terracita bastante concurrida de Vía Augusta, desde donde veo pasar los coches, y desde donde trato de atemperar los nervios que me causa pensar en la vuelta, no perder la T-10 ( la primera en mi vida, y creo que voy a guardarla de recuerdo!) o que no me roben…( Estoy fatal y lo sé)

Pienso en lo triste y deprimente que es que no haya pautado un protocolo sencillo y claro de actuación en estos casos. De haber tardado tanto en dar con lo que creo que nos puede ayudar a mejorar la calidad de vida de mi hijo. De que haya tenido que ser una docente vocacional y culo inquieto zaragozana para más señas, la que ha movido el culo para darme respuestas y dárselas a mi hijo…la que nos guía y nos asesora…no sé si esa mujercita entenderá nunca que ha sido y es actualmente tabla de salvación como pocas hemos podido encontrar. No sé si podré agradecérselo nunca.

Escucho cómo los que se encuentran en la terraza hablan sobre el partido de fútbol de la noche anterior…

Vuelvo al centro cerca de media hora antes de que la sesión finalice.

20:15. Cuando finalmente peque sale, lo hace apagado. Agotado. Literalmente. Ha jugado mucho. Se lo ha pasado genial, pero las fuerzas ya no lo acompañan. Despierto desde las 6:45 de la mañana no es para menos.

Conozco a sus terapeutas y volvemos a casa.

Solitos.

Teniendo que preguntar en una sola ocasión si ese tren va para donde creemos y para donde necesitamos. Qué bonitas son las luces que te van indicando las paradas!!!!

Intento preguntarle a peque qué ha hecho o cómo se lo ha pasado? Cómo se llaman sus terapeutas y si ha hecho amigos. Contesta vagamente. El tren lo mece hasta hacerlo entrar en un estado de semi inconsciencia del que despierta solo cuando nos toca bajar. Media horita después llegamos a casa. Pasan de las nueve y media de la noche. Apenas atina a desvestirse para meterse en la ducha y casi se queda dormido a la mesa. Lo acompaño a lavarse los dientes tras la cena y antes de apoyar la cabeza en la almohada está k.o.

Seguimos...

Gracias QK!

 

Cuídense.

 

Sean Felices.

 

Ciao.