...O QUE PUEDES ENTENDER EL DOLOR DE LOS OTROS CUANDO CADA UNO ANDA AÑADIENDO NEURAS Y PROBLEMAS A UNA LISTA UNIVERSAL QUE NO TIENE FIN NI MUCHO MENOS PRINCIPIO PORQUE COMO ABURRIDOS Y DEMENTES SOMOS UNA ESPECIE COJONUDA!!!(VI)
...Cuando salgo de la ducha George ya se ha hecho un hueco a
los pies de la cama. Miro el reloj. Las tres de la mañana. Odio tener que
trabajar los sábados.
Tras cinco horas de un sueño nada reparador y notar que mi
cabeza bien podría encontrarse en estos momentos dentro de una hormigonera,
Brad y yo nos encaminamos a lo que queda del pipican situado en la esquina.
Por la escalera me encuentro a la Señora Guillermina con Susana, la chica que
la cuida porque desde que murió su marido, Guillermina no levanta cabeza y cada
día recuerda menos cosas.
_Buenos días, joven.
_Buenos días Señora Guillermina. Cómo está hoy?
_Bien hija, mi Susana me cuida muy bien. Es muy buena
chica. Lástima que mi Antoñito no aparezca por casa porque estoy segura de que
si la viera, me harían abuela.
Miro a Susana que sonríe tímida ante la idea mirando con
adoración a aquella mujer. La lástima se refleja en su mirada cuando la cruza
conmigo. Ambas sabemos que Antonio, su hijo, murió hace ya algunos años…
_Y tus niños cómo están? Te van a hacer abuela?
_Mis niños bien Señora Guillermina. Y no, no creo que eso
sea posible.
_Y por qué no, hija?
Pues porque….
Vuelvo a mirar a Susana. Las mismas preguntas todos los días._ Porque...son
muy golfos. Ya sabe usted cómo son los hombres.
_Sí hija, sí. Todos iguales, menos mi Paco. Él sí que era
un caballero. Esta juventud de hoy en día se ha perdido por completo.
_Qué razón lleva._ Miro
a Susana que la acompaña en la ardua tarea de subir el último tramo de
escaleras que les queda. _Me marcho ya Señora Guillermina. Que
pase usted un buen día.
_Vale hija. Si ves a Antoñito en el parque dile que suba
que tiene que cenar. Y que no tarde. Adiós Cristina.
Los pensamientos me
invaden mientras Brad olisquea otros traseros y todas las esquinas del pipican. ¿Toda una vida para acabar así? ¿Para esto? ¿Toda una vida luchando para no
poder siquiera recordar las batallas? Para que no queden recuerdos? Y durante
una fracción de segundo cruza fugar por mi mente el huidizo pensamiento. No.
Decididamente no es buena idea. No puede serlo. Es injusto, macabro, cruel,
tramposo…
A las cuatro de la tarde mientras estoy con el segundo
grupo en la zona de descanso que destinamos a comer y tomar café durante los
descansos, la jefa de equipo me pregunta si puedo quedarme hasta cerrar porque
una de las chicas del segundo turno ha llamado diciendo que está mala.
Asiento. Algunas horas extras y ya habré acumulado más de
ocho para librar el sábado que quiera.
_Quién está enferma?
_Es Merche. Me ha dicho que ha pasado mala noche y por la
voz parecía cansada y algo congestionada.
_Tranquila. Sin problemas. Eso sí, cuádrame el calendario
para el mes que viene, cuando necesite pillármelo libre, vale?
_Sin problema.
Cuando Claudia sale de la sala estallamos en
carcajadas.
_Oye, a mi próximo cumple te invito. Yo quiero
enfermar como la Merche.
_No seas burro Raúl. Además no creo que disfrutaras
tanto. Y lo mismo tu chica se queja.
_Anda con la Merche….quién nos lo iba a decir!
_Ya te dije que todo era
probarlo. Se nota que le ha gustado después de todo.
Clara me guiña un ojo y
tras eso pasamos a hablar de quienes van a salir esta noche, a dónde van a ir,
dónde suena la mejor música, están los tíos más cañón y los gin tónics más
baratos…
Octubre llega con fuerza y sigo
tan sumida en la lectura y en dejar pasar tiempo, que ocurre eso mismo. El
tiempo pasa.
A excepción de haberme
encontrado con la Señora Guillermina en un par de ocasiones delante de mi
puerta tras llegar de trabajar, que a esas horas debiera estar durmiendo y no
tratando de meter un peine en mi cerradura para abrir la puerta, usar mi llave
para abrir su puerta, y asegurarme de que estaba dormida antes de volver a mi
refugio de setenta y cinco metros cuadrados, el tiempo pasó. Hablé un par de
veces con Susana y estuvo de acuerdo conmigo en que era hora de llamar a los
servicios sociales para que nos dieran una salida a su problema, y a ella una
vida algo más controlada. Su pensión le servía para pagar el acompañamiento de
Susana durante el día, las noches empezaron a ser otro cantar. Y temía que el
día menos pensado pudiera hacerse daño.
...
_Oye Neni que Carlos y sus
amigos dan una fiesta en un piso de uno de los que se independizan y me han
invitado. ¿Quieres venir? _La veo zampar con gula unos espaguetis que ha
calentado en el microondas y que huelen de vicio.
_¿Se ha independizado? ¿Qué tiene,
veinte añitos? ¿Veinticinco? ¿No nos quedan un poco fuera de alcance ya?
_Mira la pava los cojones! Que
no petarda. Que uno ha roto con su novia y quiere celebrarlo por todo lo alto.
Es amigo de mi Carlos y este sábado noche van a montar un guateque en su casa.
_Si es un guateque, casi que paso…¿Guateque? ¿No se ha extinguido ya esa palabra?
_Bueno, es una manera de decirlo
finamente.
_Finamente o en el lenguaje
dinosaurio. Joder Clarita! No dejas de sorprenderme con tus palabras finas.
_Lo mismo preferirías que te
hablara como la Merche.
_Pues mira…lo mismo…todo es
probarlo.
_Vale. Tú lo has querido. _ Se
aclara la garganta y toma la misma posición que la Merche cuando habla, manos en las caderas dejando la derecha libre para hacer posibles los aspavientos con los que lleva su melena de delante de delante a detrás _ Holaaa
precioosaaa. _Alarga la última vocal de cada palabra mientras asciende el
timbre de voz._ Oyee qué bien que te sienta ese nuevo peinadoo. Te lo has
cardado o es que olvidaste pasar por la duchaa? Por cierto, un amigo de mi
Carlos va a dar una súper mega fiesta para celebrar que por fin se ha deshecho
de la zorra de su novia. No es que yo la conozca, pero seguro que era una
guarra. No creo que estés animada para
venirte. De todos es sabido que eres un muermo, pero como te aprecio y quiero
que salgas a divertirte y a vivir la vida, lo dejo caer. Vale? Lo mismo hasta tienes suerte y acabas follando y todoooooooo!!! Y no me digas
que no tienes qué ponerte porque puedes ir con una sábana por encima.
Tranquila. Es una fiesta de disfraces ya sabes. Halloweeeen y calabazaaas,
sangreee, tripaaas y lobooos. Hombres lobo. Mmmmm. Venga bonita. No te
maquilles y estarás perfecta. Arrebuaaarrrrrrrr _ Y se acerca para darle los
besos al aire que circula entre mis mejillas y yo.
La miro incrédula alzando ambas
cejas, lo de imitar se le da de coña.
_ Y bien? Te apuntas?
_Clara, deja de juntarte con la
Merche por Dios! Que cada día te le pareces más.
_Vete un poquito a la mierda, Neni.
_ Y se gira ladeando el cuerpo de manera que su larga y rubia melena va a
pararle sobre uno de los hombros. Coloca la mano delante de su pecho y hace ese
gesto tan característico de cortar el aire y enseñar uñas y que odio con todas mis
fuerzas. _ O sea no tía. Eso de ti no me lo esperaba.
_Clara no tengo demasiadas
ganas. Seguro que no conozco a nadie. Ya sabes lo mal que se me da a mí esto de
las fiestas. No suelo ser la salsa de los caracoles que digamos. Y no quiero
aguarte la tuya. Tú estarás con tu Carlos y yo me voy a sentir…ya sabes…sola. Lo mismo es que no quiero sociabilizarme demasiado...
todavía.
_Vale ya, Neni!
Y encima se me cabrea!!
_No aguanto otro: esto o aquello no me apetece. Ni un: no tengo ganas. Ni eso de: prefiero recluirme de nuevo en casa a llorar mis penas jartándome a comer ganchitos porque estar con gente me da ansiedad porque soy una capulla del cuarto al quinto por no olvidar ni al susodicho ni a la corte de gilipollas Peter Panes que hubieron antes. No puedes estar más sola. No lo ves!!! Y seguirás así hasta que decidas salir del escondite de mierda tras el que te ocultas. Así que este sábado en cuanto acabes el turno te me emperifollas y nos vamos. No conocerás a mucha gente, y eso es lo que mola. Deja de recluirte ya, mojigata de los cojones y aprovecha el puto tiempo. A rey muerto rey puesto. Un clavo saca a otro y si no es así, nos vamos al Leroy Merlín y te compro una bolsa entera de tuercas, pero haz algo ya! Te ha quedado clarito? Tú este sábado sales. Quieras o no. Y es mi última palabra. Me voy a sacarle los higadillos a los boquerones.
Y tras observar cómo recoge los cubiertos, el táper y su botella de agua con gas, la veo acercarse a la papelera para tirar las servilletas y el pan que no se ha comido. No me mira. Parece enfadada.
Y encima se me cabrea!!
_No aguanto otro: esto o aquello no me apetece. Ni un: no tengo ganas. Ni eso de: prefiero recluirme de nuevo en casa a llorar mis penas jartándome a comer ganchitos porque estar con gente me da ansiedad porque soy una capulla del cuarto al quinto por no olvidar ni al susodicho ni a la corte de gilipollas Peter Panes que hubieron antes. No puedes estar más sola. No lo ves!!! Y seguirás así hasta que decidas salir del escondite de mierda tras el que te ocultas. Así que este sábado en cuanto acabes el turno te me emperifollas y nos vamos. No conocerás a mucha gente, y eso es lo que mola. Deja de recluirte ya, mojigata de los cojones y aprovecha el puto tiempo. A rey muerto rey puesto. Un clavo saca a otro y si no es así, nos vamos al Leroy Merlín y te compro una bolsa entera de tuercas, pero haz algo ya! Te ha quedado clarito? Tú este sábado sales. Quieras o no. Y es mi última palabra. Me voy a sacarle los higadillos a los boquerones.
Y tras observar cómo recoge los cubiertos, el táper y su botella de agua con gas, la veo acercarse a la papelera para tirar las servilletas y el pan que no se ha comido. No me mira. Parece enfadada.
_Clara…
Me mira y levanta un dedo
delante de su cara. _ Cuidadito con lo que vas a decir que no tengo er mondongo
pa fiestas.
_Pero todo es ponerse, no?
Trato de sonar divertida y adivinar así qué demonios le pasa y por qué acabo de llevarme una bronca que no viene al caso. Si realmente tenía algo que decirme podíamos haberlo charlado tranquilamente, aunque lo mismo es lista y sabe que eso no me hubiera convencido de ir a esa estúpida fiesta.
Trato de sonar divertida y adivinar así qué demonios le pasa y por qué acabo de llevarme una bronca que no viene al caso. Si realmente tenía algo que decirme podíamos haberlo charlado tranquilamente, aunque lo mismo es lista y sabe que eso no me hubiera convencido de ir a esa estúpida fiesta.
Se acerca de nuevo._No tía. _ Deja caer su culo sobre la silla de la que hace apenas cinco segundos se ha levantado. _ No todo es ponerse. A veces por más que una lo intenta no hay manera de ponerse. Y además me tiene que bajar la regla. Y estoy de muy mal humor. Y quiero que lleguen vacaciones ya. Las que sean. Para irme a Menorca y olvidar que soy gilipollas y estoy tratando de llevar adelante una relación con Carlos, y que nos hemos enfadado, bueno me he enfadado yo...y que esto no mola. Porque una sola hace lo que le da la gana, no da explicaciones y se va a dormir por las noches sin estar jodida, y puede acudir a fiestas sola porque está sola, y no porque se ha empeñado en joder al compañero y va sola porque es imbécil y quiere hacerle daño. Y por eso no lo he dejado quedarse a dormir en casa estos dos últimos días. Ni contesto a sus llamadas. Y me he vuelto la puta perra del hortelano que ni come ni comer deja. Soy idiota y sabiendo que no soy de atarme a nadie, va y llego aquí con el cuerpo tó encendío y espero encontrarme lo mismo. _Decido no decir ni esta boca es mía. Le pasa lo mismo siempre que vuelve de las vacaciones de verano. Cinco años conociéndola ascienden a cinco crisis de identidad postvacacional por tratar de encajar en unos cánones marcados por una sociedad para la que ya eres viejo pasando de los veinticinco. Ha pillado carrerilla y espero que saque lo que lleva dentro. _...y además el clima no es el mismo. La gente no es la misma.
...Carlos es muy tranquilo y yo quiero...quiero que…porque ya estoy harta…que para una vez que
encuentro la dichosa forma, pero no. _Se levanta y la veo moverse de un lado al
otro. Sigo sus pasos con la mirada. Está alterada. Si meto baza lo mismo
empieza a babear hasta contagiarme su rabia. _ ...y vuelvo a caer como una idiota.
Porque no sé tú, pero yo esto ya lo sabía. Y no quiero verme asqueada y
aburrida en una relación…Tía que estoy cercana a los cuarenta ya y con un
deprimente divorcio a mis espaldas. Llevo la marca. Y puede que el resto de
mujeres se hayan normalizado y hayan perdido las ganas, o estén depres, o yo qué coño sé, pero yo
no…estoy que me subo por las malditas paredes y no puedo decirle a Carlos que
necesito más vidilla porque lo mismo me tacha de… en fin... puta mierda vida. Y
además si acabo a hostias con él te necesitaré cerca. Y no se hable más. Te
necesito y punto que para eso están las amigas y no me lo debes pero seguro que
me lo deberás algún día cuando decidas hacer algo con tu vida y yo accederé a
que puedas quitarte esta mierda de paja mental que seguro llevarás encima…._Toma
aire, cabreada con el mundo, consigo misma y juraría que conmigo, aunque de
esto último no ando muy segura.
Asiento. Incapaz de decir nada
más. Abre la puerta de la zona de descanso y sale.
Miro la puerta. Sigo mirándola.
El pomo es sencillo. La puerta es blanca. La miro. Lo mismo necesitaría una manita de pintura, porque blanca, blanca, lo que se dice blanca...
Vuelve a abrirse y aparece la
Clara que yo conozco.
_De los disfraces me encargo yo.
_ Me sonríe, tira un beso al aire y vuelve a cerrarla. No sé qué haría sin
ella.
Cuídense.
Sean Felices.
Ciao.
;-P
;-P
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